VIVIR SIN MIEDO
Vivir sin miedo cuando tu voz no cesa, no sé apacigua como nube blanquecina en la oscuridad, no retrocede a los vestigios de sueños truncos, inacabados, por la mitad. No, tu voz no cesa, no sé diluye en la minúscula gota que anuncia la lluvia, cuando el trueno resuena en la gravedad. Tu voz no cesa, avanza, se funde en la melodía de un nuevo despertar, Cuando suena la vida la música de tu lengua no se detiene. No, no cesa, avanza, tu voz es una musa que nace en el alma de cada persona que supera la adversidad.